Racismo en auge
El pasado 5 de junio, la vicepresidenta de la Asociación de Latinoamericanos del Garraf, Mercedes Vaca Prince, que también es miembro fundadora de la Unidad Contra el Racismo y el Fascismo fue víctima de una agresión xenófoba en la puerta de su domicilio. Cuando iba a entrar en su casa, tres hombres encapuchados la asaltaron, la insultaron, golpearon y le quemaron un cigarrillo en el pecho. Mercedes plantó cara y consiguió, gracias a que pudo tocar el timbre, que no la secuestraran (la querían meter en un coche) y que los agresores huyeran. Los agresores son neonazis, seguramente cercanos a grupos de ultraderecha y al partido xenófobo Plataforma x Catalunya, debido a la información que manejaban y que usaron para asustar a Mercedes.
Este partido racista ha llevado a cabo varios ataques a personas migradas y colectivos que les dan apoyo, como la agresión que sufrió el portavoz de Unitat contra el Feixisme i el Racisme de Vilanova (jubilado de 60 años que fue atacado en la puerta de su casa) o el ataque con bates de beisbol y palos a dos activistas que protestaban contra la xenofobia en un mitin de PxC (en este episodio que sucedió en mayo, la policia, para variar, cargó contra los activistas y detuvo a dos de ellos protegiendo a los racistas).
De momento no hay más noticias sobre estos casos pero está claro que los grupos ultraderechistas y xenófobos están en auge porque es en estos momentos de crisis económica y ideológica en los que es más fácil que los discursos racistas calen entre la sociedad. La implicación cotidiana en enfrentarnos a las situaciones racistas que vemos y vivimos a nuestro alrededor es la manera de acabar con estos descerebrados.